domingo, 17 de abril de 2011

PORQUÉ A MÍ? - PORQUÉ NO A ÉL?

Qué título enigmático si lo hay.- Es imposible despejar la incógnita; no hay ningún indicio en tal sentido.- Cuando el hombre es afectado por un infortunio, que puede traducirse en pérdida de algún ser querido, una enfermedad discapacitante, una ruptura de vínculo matrimonial, o la de un compromiso previo, un negocio en ruinas, invariablemente ingresa en un particular estado, el que un escritor, además psiquiatra, define como la elaboración de un duelo.- Se refiere a tal circunstancia con la seriedad que le otorga su investidura profesional.-
-Atraviesa por una serie de sensaciones que concluyen- no siempre- en un estado depresivo.- Es ahí, cuando y, apoyo este comentario en el rigor científico, se ponen en marcha y a modo de mecanismo de defensa, una sucesión de reacciones que le impiden emplear razones filosóficas que contribuyen eficazmente a aliviar esa pesada carga que lo deteriora, física, moral y anímicamente.-
-No quiere aceptar, no entiende, no se aviene a elaborar otro tipo de argumentos que le signifique ir mejorando la situación.-
-Se torna egoísta, no quiere mirar, más que para sus adentros.- Cómo es esto? , no le importa en absoluto lo que le acontece a otros, aún cuando su situación sea diferente y en menor grado, conforme a lo que a otros le sucede.- Se entiende?.-
-Sufre cuadros de rebeldía, de reproches aún a las divinidades.- Porqué me tuvo que suceder? .- Pregunto: porqué no a él?.- Cuando niños si alguno pretendía estar por encima de otros, sacar alguna ventaja, se le preguntaba: tenés “coronita” vos”?, no sin dudas, coronas de cierto privilegio siempre se supo que es propio de la realeza.- En suma, se da por sobreentendido que en la mayoría de los casos el hombre nace, crece y se desarrolla conforme a parámetros que la naturaleza otorga a cada uno, por una cosa o por otra siempre se dijo aquello de que nacemos predestinados a llevar sobre nuestras espaldas el derrotero a seguir mientras se concrete nuestro período de habitación en la tierra.-
-De allí las diferencias que surgen entre los seres humanos, raza, color, talla, peso, etc. etc.-
Todo es cuestión de medida reza un tema musical.-
-La inevitable terquedad en aceptar aquellas condiciones que conlleven negatividad, predispone al sujeto a la primera parte del título: Porqué a mí?.- La respuesta está implícita: Porqué no a él?.-
-Desde el mismo momento en que Dios destierra del Edén a las primeras criaturas, previa advertencia del duro camino que les esperaba por haber desobedecido ciertas recomendaciones (puede tratarse de un simbolismo) pero y a pesar de todo, lo que sucede desde aquel tiempo no se ha detenido.- Se podrá dudar de la verosimilitud de no poca cantidad de hechos, por tratarse de exposiciones que aparecen en la magna literatura religiosa.- Cuando de estas cuestiones se trata ser imparcial es la cuestión.- Pero, se podrá poner en tela de juicio la doctrina cristiana respecto de su calidad? .-
-Es un verdadero conjunto de enseñanzas donde sienta sus reales el amor al prójimo y al próximo.-
-En síntesis, cada uno obrará conforme los dictados de su corazón y en paralelo con su conciencia.-
-Transitar la vida, a partir de una de sus primeras etapas, es una tarea no difícil a pesar de todas la dificultades que se pueden presentar, en el aspecto social por supuesto, ya que no se tiene edad para tomar las cosas demasiado en serio.-
-Pero a partir de un momento determinado, es otra la mirada a pesar de aquella breve sentencia que lo resume de algún modo: todo es según el color del cristal con que se

mire.- Creo que frente a una realidad puntual, terminante lapidaria, la realidad es única, no admite eufemismos, en buen romance, lirismo.- Es ahí cuando casi seguro el sujeto por lo general, comienza a elaborar toda una batería en correlato con la desesperanza, y porqué no, la desesperación.-
- Esto lo ubicaríamos en aquel que frente a la adversidad pierde la fe, quizás no por regla general su mirada se eleva hacia las alturas, inquisidora, interrogativa; entonces piensa que tal vez pronto pueda recibir una respuesta favorable.- Será?.- Obviamente se considera un desprotegido, un injustamente castigado; le llevará mucho tiempo- si lo logra- recuperarse en todos los sentidos.-
-Ahí, el porqué a mí?.- Sí es muy probable que aquellas circunstancias que deterioran, no se correspondan con una personalidad que justicieramente merecía otro destino.-
-Todo un enigma.-
-Nos imaginamos que en una dimensión desconocida alguien esté jugando con nosotros a la ruleta rusa.- Si así fuera estaríamos inmersos en un imaginario juego de azar.- En esta hipótesis, tendremos que admitir marcadas diferencias entre unos y otros; a unos mucho, a otros poco y a un tercer grupo nada o casi nada.-
-Un evangelio que tal vez pueda situarse en esta cuestión, es aquel que cuenta aquello de uno de los discípulos de Jesús, frente a la curación de un enfermo le preguntó: Maestro, para que este muchacho esté así, pecó él o pecaron sus padres?.-La respuesta habla solo de la cuestión espiritual.- No da pauta alguna respecto a conocer el origen del mal.-
Un momento: se podrá pensar en una mano justiciera?, tengo mis dudas, ya que de ser así todo tipo de maldad tendría que ser castigada y sabemos que no es así.-
-Se puede opinar sobre esto pero no suscribir respecto de su verosimilitud.-
-No creo que ningún rigor científico pueda certificar fehacientemente lo que acontece.- Si nos atenemos a la referencia religiosa no hay tampoco claras y/o convincentes respuestas.- Todo pasa por la fe que se tenga para estar verdaderamente convencidos de la intervención divina.- El creyente auténtico está sí convencido de la autoridad y/o voluntad del Ser Supremo.- Pero las razones……Digo: y porqué no a mí?.-
Trataré de que se comprenda, no que se entienda esta modesta opinión; el hipotético caso de una concordancia general respecto de abordar una temática razonable tendiente a desterrar la maldad del hombre, nos daría una histórica oportunidad de asegurarnos si las injusticias ya señaladas son en verdad un castigo a la humanidad por su desafortunada conducta, resumidas en alianzas con el mal.- Sería cuestión de probar.- No les parece?.-
-Cerremos los ojos y recordemos una sucesión interminable donde la dureza en el corazón del hombre se puso de manifiesto y vaya de qué manera.- Cuántos hechos milagrosos dejan a las claras esta cuestión tocante a lo del título.-
-La última contienda bélica se da el lujo- por decirlo de algún modo- de provocar la desaparición física de más de 50 millones de personas, amén de las secuelas emergentes de ella; mutilaciones físicas, sufrimiento por doquier familias desintegradas, huérfanos, etc.- Cuántos interrogantes quedaron y quedarán sin respuesta.- Hechos realmente conmovedores.- Uno para citar: un bombardero norteamericano, como tantos otros - hoy también se acostumbra- estaba bautizado con el nombre de la progenitora del comandante de la aeronave: Enola Gay, tristemente célebre por haber transportado la temible y destructora carga letal, bomba atómica, que fue arrojada sobre Hiroshima el 06.08.1945; dicho transporte se dirigía a otra ciudad, previamente señalada para su feroz misión, pero un factor meteorológico, hizo que se ordene el cambio de rumbo.- Tanto los sobrevivientes de esa ciudad como los de Nagasaki (segundo objetivo cumplido), se habrán formulado la misma pregunta.- Porqué a mí? Habrá dicho cada uno de los sobrevivientes; la respuesta también está implícita.- No hubo ni hay respuesta.- No sabemos si algún día la habrá.- Ya al cierre de este trabajo me voy a permitir citar un diálogo famoso entre el sabio Ernest Einstein y uno de sus profesores universitarios.- Éste le formula dos preguntas, una de que si existe el calor, otra si la luz, y porqué.- Se hacen públicas las respuestas, notables certeras, del después científico en cuestión.- Silencia total en el aula.- Luego el profesor, tal vez al borde de un imprevisto desconcierto, formula otra pregunta, respecto de la cual recibiría una respuesta por parte de su interlocutor, que vaya si sería lapidaria, creo que para el orden general.-
-Finalmente el genio es provocado por su interlocutor con aquello de: cree usted entonces que Dios creó el mal?; expectativa general. Einstein responde: No Señor, Él no lo creó, pero el hombre lo tomó para sí, porque no tiene a Dios en el corazón.- Puede agregarse algo más?.- Que cada uno saque sus propias conclusiones.-

Rosario, Pvcia de Santa Fe.- Rep. Argentina.-

OSCAR.- 17.04.2011.-

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