martes, 22 de septiembre de 2015

EL USO Y EL ABUSO


No siempre estas dos condiciones van tomadas e la mano. No es necesario, más allá de que una falta de sentido común y sin tener escrúpulos en la confianza, predispongan al individuo a usarlas cuando lo crea conveniente.
El hombre necesita del primero de los términos en todo orden de la vida. Uso y más uso, desde todos los integrantes del cuerpo, hasta transporte, trabajo, etc.
La otra cuestión, es el abuso de la confianza que se hace o hacemos en función de ello. Bien claro está que las expectativas tanto de una parte como la de la otra, están centradas en la confianza que se dispensan.
Hacer uso de esto, de lo otro, es una constante a la que todo ser humano en lo cotidiano, debe echar mano, hasta en las más mínimas cosas, no se puede prescindir. Hasta aquella persona con capacidad, necesita apelar al uso de todas las condiciones que posea de manera de poder sobrevivir, aún dependiendo.
El algún momento comenzó a decirse respecto de la persona a la cual había que aprovechar al máximo. Si se puede obtener algún rédito, tanto mejor. Entonces, uso y abuso. De ahí aquello que reza: “fue o fui usado”. Una comparación a propósito de ambos significados, es tomar al hombre como objeto en lugar de sujeto.
Abusar sexualmente: aplicado específicamente cuando en un alto grado de perversidad se somete, en contra de su voluntad a otra persona de su mismo u otro sexo. Voluntad digo, pero se califica de igual modo aún cuando la víctima sometida tenga corta edad de  forma tal de tomar conciencia de lo que le ocurre.
Abuso de poder: muy común en todo aquel que tiene por su parte, un importante cargo en la esfera gubernamental, también el que luce un ilimitado poder económico. Ambas posiciones les permiten disponer a su antojo y es ahí entonces cuando aparece casi plenamente no solo el uso de los medios a su alcance sino paralela y generalmente el abuso.
El uso: como condición imprescindible, la sabia naturaleza ha dotado al hombre, a los animales y a los vegetales, de atributos sin los cuales no le se sería posible vivir. Entre éstos se encuentra la facultad de usarlos. No sabemos, de no ser así, qué sería de los seres vivos.
De todos modos, eso no da lugar a que se cometan abusos que impliquen deterioros de todo orden.
Creo que la aplicación de ambas condiciones juntas, es el común denominador en todos los órdenes de la vida.
No se puede descartar que en todo momento el hombre haya tomado eso como objetivo. Sacar ventajas pareciera una constante que se ha enraizado en la mayoría de los mortales.
Como de costumbre no se puede involucrar a todos. Aparecen casos en que el bajo perfil se hace presente. Queda demostrado que se puede.
Pero al transgresor poco o nada le interesa de qué manera obran otros.
Habrá que convenir que el libre albedrío, traducido en hago lo que quiero o lo que me parece. Si puedo aprovechar, tanto mejor, soy un convencido de que estoy haciendo bien las cosas, máxime si no recibo quejas por ello. Señal de que el que calla otorga. Realmente otra faceta de lo que reflejo en la mayoría de mis trabajos tocante a la conducta del hombre y en la de muchos, lamentablemente, estos  se han constituido en incondicionales aliados. Parte de la maldad en evidencia.
Alguien escribió cierta vez, referido a un audaz e inescrupuloso personaje de la obra que a él no le importaba nada ni nadie que lograr sus propósitos; claro, era uno de los hijos de la primer ministra de un importante país. Abuso de confianza sobre la persona de su progenitora, sin vacilar su obcecación o no le importaba o no sabía ver a quien perjudicaba con su actitud. Hasta donde llega el empecinamiento por dar rienda suelta a sus proyectos. Herir a quien más debiera protegerse.
Lamentable sí, cuando el uso y el abuso se meten en la piel de hombre.
El sometimiento de toda índole, tiene su estereotipo en la esclavitud casi particularmente. Podría discutirse esto?, creo que no resiste el menor análisis. No hay que dejar de lado, la conducta del sujeto que usa y abusa en cualquier disciplina, de sus habilidades. A veces hasta poniendo en riesgo no solo su vida, sino la de los demás.
Hay otro aspecto que también hace a la cuestión y se trata de aquel individuo adepto a alguna corriente de opinión religiosa, deportiva o simplemente a cuestiones domésticas que se empecina ante todo y contra todo, en ingresar al campo del fanatismo, que es como se dice siempre que tiene frente a sí, el árbol que no le permite ver el bosque. La moderación es un principio básico, elemental a la que el sujeto debe adherirse sin condicionamiento alguno. Es un acabado patrimonio que enriquece en lugar de envilecer.
Todo aquel que se precie de ser una persona de bien, no debe presentar fisuras en su conducta. Cuestiones de falta de respeto a la racionalidad no pueden medirse, sin embargo a ojos vista aparece como una inequívoca señal de transgredir aquel principio antes comentado.
La gula, la avaricia, la mezquindad, por citar algunas, son también razones para involucrarlos en el tema que nos ocupa.
Algunos gobernantes y dirigentes de distintos órdenes, dan la nota en cuanto a esta temática. Muy característico en muchos de ellos. Estamos tan acostumbrados a tales procedimientos que cuando aparece alguien que difiere de aquella metodología, se lo tilda de indiferente. En la década del 60 un primer mandatario, austero hasta los tuétanos, daba muestras de una humildad por demás excesivo por su investidura, a tal punto que aquella actitud,  exasperó a contrincantes políticos quienes golpearon las puertas de los cuarteles, como se decía y sus “dueños”, derrocaron al apocado jefe de estado y se hicieron del poder. Caso de uso y abuso de la humildad y el bajo perfil.
Se han planteado los dos extremos, que como de ordinario se muestran permanentemente.
Tendremos que abogar para que el sentido común, se incorpore en la piel del hombre y aquí sí, no nos lamentaremos por lo que haya dejado de existir como sucede con los mortales en su gran mayoría.

Oscar
Rosario, Pvcia. de Santa Fé

Argentina. 22.09.2015.

jueves, 17 de septiembre de 2015

JUSTICIA SOCIAL


 Un nuevo tema hoy nos ocupa y vaya si tiene importancia.
Tenemos que admitir que esta situación que cada vez más se incrementa, tiene su buena antigüedad. Naturalmente, nobleza obliga, he de advertir que habré de referirme a la justicia social y su falta de cumplimiento. Algún tiempo atrás en una obra, abordé el tema de la injusticia, el mismo título del trabajo, pero esto atañe a las permanentes muestras de desconsideración y falta de respeto al ser humano, tantas veces abandonado a su suerte. Obvio de señalar que la sociedad necesariamente debe ser conducida, contenida para que la anarquía no siente sus reales.
En todo momento esa menuda tarea debía y debe estar a cargo de dirigentes políticos ya que a ellos les corresponde velar permanentemente por el bienestar de los ciudadanos. Deben entender que asumir tales compromisos conlleva obligaciones establecidas claramente en la Constitución Nacional. Precisamente, este formal documento determina con claridad los derechos de los habitantes del país. Descontamos sus obligaciones.
Pero lamentablemente esto no es lo que fuera de desear ya que la práctica demuestra la triste realidad que supera todo lo imaginable.
Parece que no hay forma de encarar soluciones tendientes a eliminar el flagelo de la falta de trabajo y o de vivienda digna. Paliativo: entrega de subsidios a los más desposeídos. Pero sí se habla de convertir al país en un territorio turístico, donde solo, de seguir así, tendrán cabida todas las posibilidades propias de tal intención, transporte de pasajeros, hotelería, gastronomía, artesanía y demás cuestiones comerciales que dependen de establecimientos que no requieren el empleo de mano de obra de tipo industrial.
El campo sí, genera trabajo en la agricultura como en la ganadería, amén de los derivados de esta última.
Pero es ostensible que en las grandes urbes, hay mano de obra ociosa y no preciosamente por culpa de ellos.
Al no haber fuentes de trabajo, al igual que centros escolares de franja cumpla con la mínima formación profesional, es imposible pretender que esa franja cumpla con lo mínimo, elemental. Una pequeña referencia,  se dice por ahí que podrían cultivar pequeñas superficies de tierra para obtener como mínimo algún producto para consumo propio. Pero en paralelo con esto y acudiendo a aquello de que no solo de pan vive el hombre, así solo se satisfarían pequeñas necesidades. Entiendo que esa no es la solución. Como tampoco lo es otorgar dádivas como en los tiempos de la colonización, regalando chucherías de colores para cautivar a un importante grupo de hermanos con el solo y avieso propósito de que sean funcionales al poder de turno. Para lograr eso se distraen fondos de donde no se debe.
No se pueden contemplar mejoras en la calidad de vida de aquellos a costa de restar beneficios a quienes hicieron los méritos necesarios para una remuneración justa. Otro agravio a la justicia social-
Sin trabajo, sin vivienda digna, es imposible que un país pueda emerger del fracaso y la desilusión, con una permanente muestra de una postal tan deprimente como la de aquellos países sumidos en la pobreza más absoluta, más deplorable y en donde se asientan, rabia, impotencia y en buena medida el resentimiento propio que se diferencia con otros hermanos en el extremo opuesto de una realidad que es observada con indiferencia por quienes tienen que velar por el bienestar, particularmente de aquellos que están abandonados a su suerte.
En buena parte de estos últimos tiempos, es inocultable observar gran cantidad de hermanos nuestros, que acuden a santuarios para tratar de hallar solución a diferentes problemas, con una marcada idolatría a íconos a los cuales se les atribuye poderes milagrosos. Sufre; su confianza y simultáneamente su desesperanza se apoyan incondicionalmente en aquellos..Entiendo que esta postura debe respetarse por estar orientada a la búsqueda de respuesta que los hombres no les proporcionan. Al margen de otras necesidades, solicitudes, agradecimientos un punto de referencia notable lo constituye el pedido de trabajo, aunque sea lo mínimo elemental. Es deplorable que por estas alturas, se acude a las divinidades (para aquel que crea), a fin de requerir soluciones que por su propio peso deberían brindar aquellos que a fuerza de prometer, terminan borrando con el codo lo que escribieron con la mano. Valga la comparación.
Algunas décadas atrás un líder popular abogaba por la justicia social. Estaría soñando o no habrá imaginado que aquellos que se enancan después en su filosofía, tomar al toro por la cola en lugar de hacerlo por las astas. Piensan solo para ellos, apelando al expediente de cortar por lo sano. Repartimos las ganancias, pero la de los otros, la nuestra ¡qué esperanza!.
Si de trabajo se trata, los estamentos específicos, generalmente apoltronados en lujosas oficinas, solo se limitan a apoyar las gestiones del poder, aún a sabiendas que su política no apunta en lo más mínimo a encarar soluciones de fondo. Y así por años, funcionales a intereses estrictamente personales. No es justo. Pero el fin no justifica los medios.
Vivienda digna: una utopía, la otra cara de la moneda la constituye en este aspecto las fabulosas inversiones inmobiliarias para una franja con alta posibilidad adquisitiva. Planes de vivienda para el resto: cero. A vivir, las parejas jóvenes con sus progenitores y a arreglarse como se puede. Ni hablar de aquella franja muy amplia que ha y construye o amplía asentamientos irregulares.
Otro tema grave: es imperdonable no abordarlo.
Se trata nada más y nada menos del gravísimo problema por el cual atraviesan nuestros hermanos aborígenes del Norte Y Noroeste argentino, miseria, promiscuidad, desnutrición, enfermedades que se creían extinguidas. Y la Justicia social?. Tantos representantes del pueblo en el orden provincial y nacional, hacia donde miran? Tal vez las consideran de otra galaxia.  No…sino ya estarían por estos lares los científicos especializados en cuestiones espaciales o afines. Es vergonzoso que reciban ayuda de agrupaciones civiles que se solidarizan con el sufrimiento humano.
Estas postales trascienden las fronteras…Y?
Admitamos sin ambages que el mundo allende los mares, esta emulando desde centurias a aquellos aventureros que so pretexto de humanizar y evangelizar arribaron a América a llevar a cabo un descomunal despojo…en fín…historia conocida.
En síntesis, la justicia social no se pregona como muletilla. De una u otra manera, estamos comprometidos a que se ella se cumpla. En otras latitudes se ha concretado, aunque lamentablemente no en todas. Qué esperamos para que esto se concrete?

OSCAR
Rosario, Pvcia. de Santa Fe

Argentina- 16.09.2015

domingo, 13 de septiembre de 2015

LA MUJER


 No podía dejar de referirme a este singular ser humano. No me lo perdonaría. Consecuentemente habré de abordar el tema tratándolo con la consideración que amerita.
La aparición de la primera mujer a poco de la Creación, marca todo un hito en la historia del sexo femenino, amén del papel preponderante que a ella le toca como parte de un inigualable rol protagónico.
La protagonista principal de esta singular historia está indubitablemente ligada a la continuidad de la vida.
No se justifica por razones obvias un mundo donde la mujer no tenga razones más que suficientes para prevalecer en todos los actos que lleve a cabo.
Un largo historial nos deja abundante bibliografía respecto de la intervención de este singular personaje.
Algunas muy conocidas, otras no tanto, enumerarlas a todas, nos ocuparía buena cantidad de material de escritura. Comenzando por Eva, por Sara la esposa del Patriarca Abraham, Ruth, Esther, Dalila, Herodías, Salomé, etc. etc.
Una obligada detención para hacer hincapié en una dama por demás excepcional de nombre María, elegida nada más y nada menos por el Altísimo para convertirla en madre a través de una concepción tan excepcional que tendríamos que caratular de un verdadero milagro, el que sin embargo le ocasionó no poca cantidad de problemas…..valor agregado: sufrimiento desde y para el resto de sus días, aceptando con estoicismo todo un cúmulo de contrariedades con un hijo sobre el que pesaba en él, toda una ejemplar responsabilidad como la que fue luchar contra viento y marea, primero tratar de cambiar las antiguas leyes judías, cuyas autoridades no estaban convencidas de este particular y atípico personaje, luego dejar para la posteridad una filosofía de vida inigualable.
Ubiquémonos en el sufrido corazón de Mamá María que en el momento de gestación de su hijo, alguien, un allegado profetizó a María: una espada atravesaría su corazón y vaya si así ocurrió. Naturalmente que nadie querría estar en la piel de esta venerable mujer al estar presenciando la pasión y muerte  de su hijo.
No conoce el común de la gente el atroz pesar de María y su amiga María Magdalena.
Corre por cuenta de cada uno imaginar lo acontecido, inenarrable de veras.
Me permito recordar- cada tanto lo hago- una parte de una letra de tango que dice: no hables mal de las mujeres porque una de ellas fue tu madre….respecto  de ello, habrá algo que agregar?
No puede dejar duda la defensa que debe hacerse de la mujer. Se concibe un mundo sin mujeres? Ni preguntar siquiera. La creación contempla la presencia de hombre/mujer para crecer y multiplicarse. En el orden humano, no hay modo que pueda sustituir al actual en ningún aspecto. La necesidad de procrear, de amar a los hijos, disfrutarlos, también incluye a la raza animal, o en todo caso a solo una parte de ella.
Si de mencionar personajes femeninos célebres, podríamos destacar a Juana de Arco, Madame Curie, Sor María Teresa de Calcuta, a Florence Nightingale, Lady Godiva, Cleopatra, Mata Hari, Alfonsina Storni, la primera aviadora argentina Carola Lorenzini y muchas pero muchas más. Un emocionado homenaje y recuerdo naturalmente para ese grupo de mujeres inmigrantes, que en Nueva York un 8 de Marzo de 1908, pagaron con su vida de una manera cruel- por reclamar la humanización del trabajo y de salarios dignos. Estaban laborando en un taller de costura, encerradas bajo llave y prendido fuego al local, muriendo carbonizadas en medio de gritos que nadie quiso oir. Una actitud patronal vergonzosa y delirante. Su empleador, mesiánico por excelencia, creía que esa era la solución, la salida.
Se hizo justicia, el sacrificio de estas infelices valió la pena- paradoja mediante-  Anualmente se las recuerda con la institución del Día Internacional de la mujer. Este modesto amante de las letras, desde este humilde espacio brinda a todas sin excepción de raza, color y actuación como mujer y madre,  un sentido homenaje.
Pero si de mujeres de predicamento se trata, y dentro de la imparcialidad que ha menester y en una opinión sin condicionamientos y lógica mediante, no podía dejar de reconocer el poder de convocatoria de la señora María Eva Duarte de Perón, quien más allá de sus errores y aciertos, se constituyó en una conductora de las más queridas. Odiada por aquellos que no compartían su filosofía, no puede negarse que trabajó incansablemente y finalmente muy enferma, para estar cerca de los desprotegidos. Aquellos que se envilecieron con ella, hubiera sido mejor que la imitasen en más o en menos, pero que hicieran algo para despertar la sonrisa a muchos que realmente no la conocían y que no sabían practicarla.
Todo aquel que como yo vivió esa época, podrá dar fe que la mayoría vivió con felicidad y esperanzas. Hoy solo un grupo minúsculo vive tranquilo sin zozobras, pero y el resto? Cuenta la leyenda que los ingleses inventaron un personaje llamado Robin Hood, nosotros para no ser menos, teníamos también al legendario Mate Cocido. Ambos, según se cuenta, sacaban dinero a los ricos para dar a los pobres. Hoy y acá una dama que rige los destinos del país, conforma o canjea trabajo- que no hay- con prebendas que, sustraen de las cajas de jubilaciones, negándoles y aportando injusticia a aquellos que trabajamos y aportamos por muchos años, para sostener una política demagógica y electoralista, atenuando la hipótesis de conflictos sociales. Me atrevería a firmar lo que sostengo.
Una integrante del sexo débil que seguramente no será recordada como las mencionadas anteriormente.
Una pequeña reseña de las vicisitudes que en la antigüedad soportaban las mujeres: poblaban los harenes, servían por docenas a un jefe de tribu, patriarca rey. Relegada en todo sentido en cuanto a la pretensión de articular una palabra. Aún hoy, en algunos países no occidentales, está sometida al hombre en todo sentido.
Pero eso quedó muy atrás, progresivamente la mujer ha conseguido liberarse de odiosas ataduras hasta ir obteniendo un rol protagónico de envergadura. Lentamente, hoy se aprecia lentamente la inversión de los roles. Podrá ser totalmente?
No alcanzaría ningún elemento de escritura para reflejar la conducta de esta insigne figura. Quien no podrá tener su propio testimonio. Solo un necio podría negarlo.
La vida es un ida y vuelta: primero siendo hijos, después padres y más adelante abuelos. No olvidar que las distintas etapas, nos encuentran ligados a ellas, en todos los casos con vigencia permanente.
Claro, que llega un momento en que el destino supuestamente señalado de antemano, determina muchas veces en forma prematura la partida de la mamá. Descuento que la desaparición física de ese significativo ser ocasiona un dolor indescriptible. Quien más, quien menos, lo sentirá de manera diferente, pero nadie podrá negar que forma parte de ese ser que lo concibió en sus entrañas. Imaginamos una planta de cuyo ramaje van naciendo retoños, indubitablemente forman parte de aquella. Creo que nunca mejor aplicada la comparación. Cuando aparecen los primeros brotes todo aquel que ame a aquellas, no puede menos que alegrarse. Las plantas sentirán emoción seguramente……tienen vida.
Me he abocado a resaltar plenamente la emblemática figura de la autora de nuestros días, como un merecido homenaje- indiscutido por cierto. No puede ni debe dejarse de honrarla en ningún momento de la vida, eso sí, mientras permanezca en este mundo ya que una vez que no está, de nada sirven los homenajes que se le brindan, ni tampoco el arrepentimiento si  no hemos procedido como corresponde.
Mujer, hija, esposa, madre: bendita seas! Tú que haces honor permanentemente a tu carácter de tal, el Señor te ha concedido esa gracia y ojalá, el hombre a la par tuya en todos los roles, te acompañe en forma permanente para hacerte feliz como siempre quisiéramos verte, ah…y como te lo mereces.
*Qué nadie rompa esta regla.

OSCAR
Rosario, Pvcia. de Santa Fe
Argentina- 13.09.2015





viernes, 4 de septiembre de 2015

LA DEFORMACION DEL IDIOMA


 Desde siempre se habló de nuestra riqueza idiomática. Algunos opinan, como Pablo Neruda, que la conquista española nos dejó un precioso legado. Se refería al lenguaje. No comparto esa opinión, más allá de que nadie puede dejar  de reconocer la jerarquía del escritor. Lástima grande que aquellos aventureros dejaron una impresión tan deplorable por los medios utilizados para despojar vilmente a los países latinoamericanos de riquezas naturales. El idioma quedó como una señal, un sello, un estigma. Una pena- según mi modesta opinión- que las expresiones del gran artista chileno, mezclan el  idioma con una presencia salvaje, infame y ruin. Qué aportaron?, bueno, de resultas de violaciones masificadas y/o entregas de las naturales, emergieron  innumerable cantidad de mestizos. Indios y españoles nativos al fin.
En realidad, no se puede negar la calidad de esta lengua con tamaña cantidad de términos. Vergüenza ajena que merced a intromisiones propias del crisol de razas que se instaló en el país, más una docencia empobrecida en conceptos, se fue incorporando masivamente un lenguaje plagado de acepciones desconocidas que calaron hondo en la costumbre de los ciudadanos, particularmente los notables de la antigüedad. No es fácil a ciencia cierta determinar un tiempo preciso en que el principio del uso de la lengua española fue paulatinamente quedado de lado. La aparición del lunfardo, un “idioma” orillero y ramplón se incorpora al uso en un ambiente de malevos que pesaban en los arrabales, no de lo más granado de la sociedad. Sin embargo, surgieron poetas de fuste que hicieron honor al idioma aunque utilizándolo fragmentado pero con calidad y riqueza abundante, que hoy se constituyen en verdaderos documentos. Los cultores de un idioma razonablemente delicado, se los encuentra en países vecinos también, aunque utilizan términos diferentes a los nuestros para señalar el mismo objeto o lo que fuere. Así vemos que emplean palabras para algo que a nosotros nos cuesta decirlas aún en voz baja.
Por unos años se habló no el castellano precisamente, pero se utilizaba un idioma rebuscado, no elegante, tampoco chabacano. El argentino si lo aprendió, no lo usa precisamente lo que implica no habar con propiedad. En las escuelas particularmente del nivel secundario, siempre fue una materia respetable, pero la calle y los medios, cuando no, fue marcando todo un estilo.
Es, por lo tanto una verdadera lástima que con el timbre de voz del argentino, salvo la tonada que caracteriza a algunas zonas del país, se diga: voz argentina. Una verdadera pena que se haya deformado el idioma de una manera tan burda, con incorporación de términos a modo de comparación y ya es común el empleo del acento en casi todas las palabras en tiempo de verbo, terminadas con la letra a. Ejemplo: jugá, ganá, estudiá, andá, etc. etc., cuando lo correcto es: juega, gana, estudia, ve.
Pregunto: quién autorizó particularmente a los medios, como así también a aquellos que elaboran cartelera publicitaria callejera o en vehículos del transporte público de pasajeros, a destacar ese mamarracho donde por otra parte predomina el tuteo como una evidente falta de respeto a la delicadeza en el trato. Algunos dirán: bueno, no es para tanto, pero entonces quitemos de la docencia a los profesores de castellano, ya que ellos escriben con la mano lo que la mayoría borra con el codo (comparación mediante). No me incluyo en esa problemática.
En el año 2004, se llevó a cabo en esta ciudad de Rosario, Provincia de Santa fe- Argentina, el tercer Congreso Mundial de La Lengua. Concurrieron los más encumbrados referentes de habla hispana. No trascendieron los resultados ni los temas en trato. Solo y realmente esporádica gracias a Dios, se nos muestra la poco edificante exposición de un conocido humorista argentino hoy desaparecido, dándole prensa casi como un homenaje, a un término grosero propio del vulgo que en mi opinión nada tenía que ver con el evento. En suma, otra versión de la paradoja que aparece en contradicción con la seriedad nada más y nada menos que el correcto uso del idioma. Como opinión personal se me ocurre que la nota humorística desprestigiaba el carácter del congreso otorgando una imagen nada positiva al evento. De no creer la risotada de los “genios” de la pluma y la palabra. Una extemporánea demostración de falta de respeto al pueblo, que esperaba una verdadera y ejemplificadora muestra del verdadero uso del idioma. No sé de que se reían y porqué.
Otro alegato y van…..
Volviendo al uso del idioma, parece que también a él le tocó aquello de la libre expresión que ya sabemos se refiere a que en todos los medios de difusión se puede decir lo que a cada uno le parece bien. Controlar este aspecto podría suponer la imposición de censura: palabra prohibida por estos lares. Otro atentado grosero al idioma.
Hablar no significa utilizar el idioma en todos sus aspectos, los escritores meticulosos al fin, respetan el idioma si bien no el original, pero cuidando el uso de las palabras en forma correcta, sin incurrir en un lenguaje procaz o soez. Incluyo terminantemente a ciertos redactores en cargos directivos, que aprovechan la chatura intelectual de un buen número de admiradores de la prensa chatarra que se ocupa de personajes con solvencia moral cero. Deja ganancias, es su adicción. Están contaminados y llenos de mosto, pero el tiempo, los hábitos son los que marcan el compás y si no  se puede evitar, hay que escuchar la “música” que ellos difunden.
Hace ya algunos años. En TVE. Madrid, un conductor de programas de salud, sí que utilizaba el castellano a la perfección, con el frecuente uso de verbos como tenéis, habéis, etc. Términos originales del idioma pero infrecuentes oir.
No puedo dejar de destacar el uso deformado en grado sumo por la juventud.
En efecto, una modalidad que si bien no entraña peligro, somete ya desde adolescentes a una muy particular manera de escribir. Lo hacen breve, conciso y con errores (yo los tildo de horrores). Palabras abreviadas, que no contribuyen en nada al uso enriquecido del idioma. El uso de la telefonía móvil contribuye en la juventud a utilizar un lenguaje expeditivo, empobrecido, estúpido y propio de una miopía mental sin límites. Leer, qué es eso?. No podía dejar de mencionar el uso de la computadora  que absorbe un precioso tiempo que bien podrían aprovechar para estudiar o leer. En definitiva, esa práctica no les otorga un excepcional aprendizaje. Salvo que los móviles ofrecen algún programa de preguntas y respuestas, que no se corresponde a los más jóvenes, carentes de una cultura apropiada.
La cultura de los pueblos depende en gran medida de nosotros, como también aquello de no perder la memoria.
Los padres generalmente, no todos, utilizan un lenguaje razonable toda vez que quieran hacer docencia entre sus hijos. Pero la calle es como una propaladora de aquellos malos hábitos. Creo que todos entendemos el origen. Por si todo esto fuera poco, se anuncia la aparición de teléfonos móviles con frases hechas, de manera de ahorrar tiempo y esfuerzo en el marcado de teclas de pequeño tamaño, algo diferente a los tradicionales teclados de máquinas de escribir, calcular o computadoras. Se utilizan códigos que al aparecer y ser oprimidos mostrarían frases convencionales completas.
Y así estamos. Los docentes se ven superados por una caída vertiginosa de prácticas y teorías según  les fueron enseñadas, a consecuencia de la inconducta irresponsable de los educandos sostenidos sin límites por la mayoría de sus progenitores. Afortunadamente no muchos que con una cochina verborragia y puños crispados, defendiendo a los bastardos sin escuchar siquiera una palabra de los maestros. Ejemplos de palabras soeces, que son escuchadas por los “niños” y así por añadidura se sienten respaldados por considerarse víctimas.
Y la afrenta al idioma, se ve que a muchos poco les importa, sino que sean masoquistas y se “castiguen” con la mayoría de nuestros programas de TV. No hace falta indicarles que los vean, existe sí, una repulsa general.

OSCAR
Rosario, Pvcia. de Santa Fe

Argentina- 04.09.2015