miércoles, 18 de mayo de 2011

BUENAS Y MALAS ACCIONES

En esta oportunidad habré de modificar un tanto la filosofía, al referirme a la conducta del hombre, tanto la positiva como la negativa.-
-Nadie podrá negar que existe desde siempre.- Tal vez mi intención tenga algo que ver con reflejar tales actitudes para que el hombre- salvando las distancias- tome los escritos como un espejo a través del cual pueda mirarse y reflexionar respecto de cómo actúa frente al mundo.-
-Pero voy a dejar todo aquello que parece rayano en el pesimismo o escepticismo para tratar de rendir un modesto homenaje a aquellos que sin incursionar en la hazaña rinden culto a las buenas acciones, son devotos incondicionales de todo aquello que tenga que ver con el amor al prójimo.-
-Personajes memorables que nutrieron la tierra desde los más encumbrados hasta los más humildes.- Para no pecar de injustos, no sería prudente mencionar solo a los más conocidos, que verdaderamente hacen honor al bronce, al mármol o a otra forma, de manera tal que se los recuerde aunque más no sea que a través de una pintura.- Todo aquel que lea mucho, tendrá oportunidad de corroborar esto, inherente a los desconocidos.-
-Hubo y hay seres anónimos dando un claro ejemplo de bajo perfil o por aquello de que una mano no tiene porque saber lo que hizo la otra.-
-En la actualidad y por lo que conocemos, en todos los órdenes hay buenas acciones y pareciera que frente a los energúmenos que hacen todo lo contrario, sus actitudes nos llaman la atención frente a la conducta contrariante de aquellos devotos de qué me importa.-
-Hay que rendir justificado culto a las madres y porqué no a los padres que permanentemente se desvelan por los hijos, aún cuando otras obligaciones no les permitan estar a su lado todo el tiempo.- Sería innecesario abundar en consideraciones ociosas.-
-Toca el turno a los maestros; qué labor inconmensurable la de estos profesionales de la educación.- A los médicos- no a todos naturalmente- porque a aquel que su estado de salud se ha deteriorado y siente necesidad de recurrir, se encuentra con la versión de aquel que verdaderamente posee vocación de servicio, demostrando una calidad humana destacable al máximo, más allá de sus aciertos o errores.- Como no podía ser de otra manera, a aquellos que son médicos y no por vocación, sino por haberse dado cuenta tarde que eso no era de su agrado- Una personalidad en abierta contradicción con el juramento de Hipócrates.- Pero dicho compromiso forma parte de una obligación que la carrera profesional le exige.- Pero de ahí a cumplirlo, en muchos casos lo contradicen permanentemente, rindiendo culto a la falta de respeto y consideración a sus pacientes que ingenuamente se entregan a ellos con la credibilidad y esperanza que la mejora de la calidad de vida le imponen.- Maltrato, parquedad, brevedad en la atención médica en determinados centros de salud.- Otros, los más cretinos, y esto es un secreto a voces, mercan a mansalva con el ejercicio de su profesión.- Arte de curar o de currar? (pido disculpas por el término callejero empleado).- Cuando hablo de aquel juramento, recuerdo a los funcionarios que un proverbial descaro, juran con una mano apoyada en los Santos Evangelios.- Que cinismo! Y no se ruborizan, todo lo contrario, sonríen con actitud hipócrita, para los fotógrafos, por el diploma y con la sensible y generosa mejora económica que el cargo al que asumen lleva consigo.-
-Una dedicatoria especial y merecida para el olvidado Dr. Maradona, claro ejemplo de humildad, decencia, moral.- Asimismo entre los desprotegidos y así murió sin honras de ninguna naturaleza.- Claro con él y su familia no había que quedar bien.- La ofrenda moral y la fotografía en primer plano no representaba ningún rédito y tampoco una nota periodística para resaltar insidiosamente esa ausencia.- Dr. Maradona: mi homenaje a esa generosa cuota de bellas acciones.- Descanse en paz.-
-Toca el turno a todo aquel ciudadano que su actividad laboral lo obliga a tener trato con el público.- Lindo tema verdad, bueno aquí hay de todo y para todos los gustos.- Su capacidad o falta de ello lo ha llevado a posicionarse detrás de un mostrador comercial o en sectores de atención al público en reparticiones oficiales.-
-Naturalmente hay de todo un poco.- Esto responde al humor de cada uno.- Más allá de que éstos se ven a veces enfrentados a desaforados sin escrúpulos, deberían entender y estar preparados específicamente para servir a la gente y no en cambio, pretender ser servidos.-
-Se desprende por la experiencia habida que la mayoría o no le han enseñado reglas de educación para tal cometido, o la han recibido y poco les importa aplicarla.- Indolencia, indiferencia o qué me importa.- Penoso de veras.- Tendrían que estar verdaderamente agradecidos que poseen un trabajo, en muchos casos bien remunerados.- Pero las cosas están así, el amor al prójimo en los que cometen malas acciones, se nota brilla por su ausencia.-
-Pero según la sentencia, no hay regla sin excepción.- Obedeciendo a algún principio de la Ley de Murphy, todo no puede ser igual, algo rompe con la paridad y sobresale.- En este caso, podemos encontrar a seres afortunadamente a los cuales se puede tratar; aquellos a los que uno busca para que lo atiendan, seguros que van a encontrar una atención destacada, balsámica podríamos decir.-Este mensaje va tanto para unos como para otros.-
-La clase dirigente - salvo muy raras excepciones- no se destaca precisamente por aquello.- Es por demás abundante, se podrían escribir varios libros (sin embargo algunos hay) en donde se señalan actos de verdadera desvergüenza que han tenido y tienen como protagonistas a gobernantes y funcionarios de primer nivel, en desafortunadas intervenciones que incuestionablemente y como el vulgo dice: “nos ponen los pelos de punta”.- El que calla otorga dice la sentencia.- Justo es reconocer que estos señores- pero con minúsculas- no pueden demostrar siquiera que todas las acusaciones son calumnias de los enemigos.-
-Si bien en forma directa no podemos involucrar a todos ellos, es incuestionable admitir que todo aquel que permanece constituyendo la clase dirigente con poder, inevitablemente se convierte en partícipe necesario o en cómplice por omisión, conforme lo establece el Derecho.- Por la triste experiencia recogida, creo que huelga todo otro comentario, más allá que esta forma de protesta sirva- que ya es mucho para que el ciudadano común no convalide con su apoyo esos vergonzosos propósitos.-
Conclusión: Un deseo sincero de que puedan acrecentarse y llegar al máximo las acciones que enaltecen al hombre, con lo cual, las otras, se constituirían en un mal recuerdo.-

Rosario- Pvcia. de Santa Fe- Argentina

OSCAR- 18.05.2011

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